Como la vida misma. Sigo viendo.


Sigo viendo a muchos curitas con cámaras de foto de más de 2.000 eurazos por lo menos. Digo yo, que se podrían comprar una más baratita ¿no? Al no ser que estén haciendo un reportaje sobre la Miseria y Pobreza, que son Patrona de España .

Como la vida misma.Curas.


No se si tendré que ir otra vez al oculista, pero cada vez  veo a más curas gordos. Será el estrés que tienen.

Ser Español.


Hablando ayer con un amigo le dije una cosa que hasta me gustó: ser Español también es aguantar a todos los políticos chorizos, alcaldes, alcaldesas y concejales mangantes del mapa español no ni ná.

Barcelona.


Sepan, que confundir la política e implicar a todos los catalanes por los ideales de uno no está nada bien, tengo amigos catalanes y son muy buenas personas, incluso más que muchos de aquí, que con la palmadita en la espalda es como si te clavaran un cuchillo. 

Para ser respetado hay que empezar por respetar a los demás, cosa difícil de explicar a muchos que solo viven para estas cosas cuando para lo que tendrían que vivir no tienen cojones. Un saludo a todos mis amigos catalanes como también los de aquí, que son seguidores del Barcelona. Que reine el buen rollo y la armonía y no sigamos el juego a los politicos, por eso os aconsejo que se tomen un pelotazo de whisky o se fumen lo que quieran. Pero siempre con buen rollo.

Como la vida misma. A la Centuria Romana Macarena.


Como todo en la vida, hay que hacerlo bien o por lo menos intentarlo para llegar a algo, lo que sea, en este caso a la Música. Y que mejor que nombrar  a la muy clásica, muy pura, muy particular, muy romana, muy sevillana y muy leal Banda de Cornetas y Tambores de la Centuria Romana Macarena con el estilo de siempre, el que parece que muchos olvidaron con las nuevas modas de meter instrumentos para crear, crear y crear, para hacerse super-únicos en la música discotequera cofrade.

Están equivocados si así siguen pensando, porque la mayoría de las composiciones son para  para cogerla y no escucharla ni en la playa, porque han ido buscando más el aplauso barato de un público de oídos analfabetos, que mantenerse en la esencia de la línea y tradición,  que hasta a la banda sonora de Superman le harán algún día una marcha y dirán que es tradición. Un mojón como la cabeza de un chino, sólo han  buscado sus intereses y punto, que no me vengan con cuentos diciéndome que tiene que haber estilos, claro que sí, estilos de Bandas de Cornetas y Tambores y Agrupaciones Musicales, que por cierto las  respeto y me encanta. Pero no me digan que son de cornetas, porque eso no se lo cree ni el mismísimo Rey llevando el banderín de la banda.

Por todo esto y porque así lo veo y siento, quiero felicitar a toda la Banda de la Centuria Romana Macarena, por transportarnos a más de media Sevilla a un tiempo que se nos fue, ese que tantas veces soñamos y que en el Aniversario de la Macarena lograron llevarnos con sus sublimes toques macarenos. Pero sin tantos inventos ni tradiciones como hoy, que cualquier día se va a tirar uno de estos que van de listo un eructo y lo vamos a hacer tradición, dejando en el paro a un montón de buenos tambores y cornetas sustituido por tan asqueroso flato. Felicidades Centuria.

La Hermandad de San Crispín y San Crispiano del Salvador.


La Hermandad de San Crispín y San Crispiano data de 1515, y fue del gremio de los zapateros de Sevilla, la cual tuvo su sede en la magnífica y segunda Iglesia más importante del Salvador después de la Catedral.

Los zapateros tuvieron desde su fundación, un retablo en una de las naves laterales del Salvador, y tiempo despues de la construcción del edificio, cuyas obras terminaron en 1712, los hermanos zapateros decidieron que debían adquirir un nuevo retablo que cobijase a las imágenes titulares y que estuviese acorde con la grandeza del templo. Es en 1730, cuando los hermanos se dan cuenta que su retablo era de fábrica antigua y no correspondía a las numerosas y artísticas capillas del templo, por esto acudieron a los ensambladores, arquitectos y escultores sevillanos Francisco José y José Fernando de Medinilla para la talla de su nuevo altar.

 Hoy el retablo se conserva en la cabecera de la nave de la Epístola de la citada Iglesia, el cual está formado por Banco, un cuerpo de tres calles y ático, presidiendo su hornacina principal una Dolorosa, que fue la transformada de una antigua efigie de Santa Ana flanqueada por los dos Santos del gremio, San Crispín y San Crispiano. Hermandad que quedó extinguida a lo largo del siglo XIX. El retablo actualmente lo preside la queridísima Borriquita de la Hermandad del Amor, la ilusión de todos los Niños y mayores todos los Domingo de Ramos.

La Virgen de la Cinta de la Catedral de Sevilla.

Se encuentra la Virgen de la Cinta en un altar de la Capilla de San Isidoro de la Catedral de Sevilla, estando atribuida al afamado y gran Lorenzo Mercadante de Bretaña hacia 1470. 

La imagen posee una larga cinta en torno a su cintura, la cual simboliza consuelo, remedio y protección.

El origen de esta preciosa advocación mariana es antiguo. Según fray Felipe de Santiago en 1714, publica la leyenda diciendo, que un zapatero de nombre Juan Antonio invocó a la Virgen por tener un intenso dolor en el costado. Poco después encontró una cinta, y al ceñirsela el dolor desapareció inmediatamente.

La Virgen del Madroño de la Catedral de Sevilla.


La bellísima y desapercibida Virgen del Madroño se encuentra en un retablo inmediato a la Puerta de San Miguel, imagen de alabastro policromado, la cual (mide1,20 metros). 

El portentoso y sublime grupo escultórico está compuesto por tres figuras de gran importancia, atribuidas a Lorenzo Mercadante de Bretaña hacia 1454, donde podemos ver a la Virgen con el Niño en su brazo izquierdo y a sus pies un ángel genuflexo, que ofrenda a Jesús la cestilla con los simbólicos madroños. Si no la conocen visítenla, merece la pena.

El sepulcro del Cardenal Cervantes de la Catedral de Sevilla.


Gran sepulcro y una de las mejores muestras de la escultura funeraria de Sevilla es el dedicado al Cardenal Juan de Cervantes, que se encuentra en la Capilla de San Hermenegildo de la Catedral sevillana. 

El sepulcro es obra del destacado Lorenzo Mercadante de Bretaña hacia 1458, de alabastro y el cual descansa sobre unos leones, presentando en el frente decorados con escenas de la vida de Jesús tallados  con una gran maestría. Al Cardenal se presenta yacente, sobresaliendo su naturalismo e impactante  rostro, toda una obra de arte digna de ver.