El incienso.


El incienso.

Como todos saben ya, y en especial mis queridos amigos los capillitas, el incienso según la creencia más generalizada es que tiene la propiedad, al ser quemado, de alejar los malos espíritus; por eso es utilizado para purificar lugares y objetos, en ritos religiosos como también mágicos.

Lo que muchos no saben es que la ceniza del incienso en algunos lugares amasándolas con saliva y dispuesta sobre la piel, sobre todo en la frente, sirve para protegerse de las influencias negativas,  esas que abundan en nuestra Cofradías. Ya saben, mañana prueben con la ceniza.

La lagartija.


La lagartija.

No se asuste, no voy a hablar de usted que es mujer mal, para nada, pero si tiene que ver con vos.

En algunos pueblos del País Vasco, las mujeres para curarse de las rijas, una afección en un ángulo del ojo, junto al lagrimal, se colgaban del cuello una especie de cilindro de lata agujereado y dentro colocaban una lagartija viva, algunas pensarían en colocar a una de su especies, pero no entraban claro está.

Capicúa.


Capicúa.

Como sabrán, los números siempre han despertado curiosidad en los hombres como superticiones también. Hay una bastante popular como la de los capicúas, números que leído tanto por la izquierda como por la derecha tienen el mismo significado. Por lo que dicen que dar con uno de casualidad trae buena suerte para todo el día. 

Algunos han dado y les aseguro que su mala suerte ha seguido.
La palabra capicúa procede del catalán, y dicen que aparece en los primeros años de circulación de tranvías en la ciudad de Barcelona, que en estos era obligado adquirir un billete con numeración consecutiva. Por ello, como se obtenía el mismo número capicúa al azar promocionaba suerte, siendo los mejores capicúas los formados por 5 cifras.

La Canícula.


Normalmente se conoce con esta palabrita lo que es el periodo de año en que más aprieta la calor, (que se lo digan a un sevillano). Pero aquí viene lo bueno, antiguamente se creía que los días caniculares ejercían una influencia malísima, la que debía de ser combatida con algún tipo de rito, por esto lo romanos solían sacrificar preventivamente un perro rojo (y yo creía que era un perro verde).

Frases para la vida. Los hechos.


Frases para la vida.

Y los hechos son los que cuentan, las palabras solo son palabras.

Frases Cofrades. Cofrades que son capaces de inventar.


Frases Cofrades.

Una gran mayoría de los cofrades son más capaces de inventar cualquier evento y a cualquier hora que ayudar antes a un hermano necesitado.

Y dijo San Francisco de Sales.


Y esta vez no lo dijo el Bohemio, lo dijo San Francisco de Sales : Dios no juzga de la perfección de nuestras acciones por el número de ella, sino por el modo. ¿Se dan cuennn?.

La expulsión de los mudéjares en Sevilla.


Es el adarvejo, llamado así por él adarvejo o muro pequeño que lo circundaba o Morería, lugar que ocupaban los moros o mudéjares, tras la conquista de Sevilla por Fernando III.

La Morería estaba situada por la Costanilla de San Isidoro, hoy Plaza de la Pescadería, con calles y callejas entre la Plazuela de la Verdura y Plaza del Pan, que dentro de este recinto tenían su mezquita para el culto.

Fue el 20 de Julio de 1501, cuando los Reyes Católicos firmaron la célebre pragmática de expulsión de los mudéjares, fechadas en Granada este mismo año, cuando la Morería sevillana estaba ya casi extinguida. El mandato de los Reyes Católicos se cumple en Sevilla el 15 de Febrero de 1502, ejecutado por el entonces asistente Conde de Cifuentes, por lo que se incautó la mezquita y casas que poseían los mudéjares.

Hay que tener en cuenta, que no todos los moros dejaron Sevilla, algunos permanecieron hasta 1505, en que hubo una ofensiva predicadora por fray Martín de Ullate. Todo un insigne predicador  religioso de los ermitaños agustinos, que fue apoyado por el Arzobispo de Sevilla Fray Diego de Deza.             
                     

Frases Cofrades . Los cofrades son cofrades los jueces.


Frases Cofrades .

Los cofrades son como los jueces, siempre están juzgando.

Hoy muchas Rosas.


Hoy muchas Rosas se marchitarán en las manos venenosas de muchas.

Cofrades muy enamorados.


Cofrades muy enamorados de su mujer, pero no dejan hoy su ensayo de costalero.

Todo el mundo pasa de San Valentín.


Ahora todo el mundo pasa de esta día de San Valentín para quedar bien por aquí. Pero ya han ido a comprar al Supermercado que todos conocemos.

Refrán. De planes.


Que verdad más grande lo que dice mi refranero: De planes que no cuajan y cuentas que no salen, se llenan los asilos y los hospitales.

El Monasterio de San Isidoro del Campo.


El muy desconocido Monasterio de San Isidoro del campo se encuentra situado en el municipio de Santiponce, provincia de Sevilla y cerca de la muy también desconocida por muchos Ruinas de Itálica. 

Este monumento fue el primero en conseguir el título de Conjunto Histórico Artístico de Interés Nacional de la provincia de Sevilla, el 10 de Abril de 1872.

Fue fundado el Monasterio de San Isidoro del campo por Alonso Pérez de Guzmán, más conocido como "el Bueno" (no como muchos), noble español y al que se considera creador de la Casa de Medina-Sidonia. 

La edificación del Monasterio se hizo sobre una ermita mozárabe, la que según la tradición fue donde estuvo enterrado el Santo y sabio San Isidoro, hasta su descubrimiento y trasladado a la Colegiata de León.

Cuenta una leyenda, que bajo el antiguo templo mozárabe estaba enterrado el cuerpo de San Jerónimo, siendo curioso que junto a la primera Iglesia se construyó otro templo, conocido estos como "Las Iglesias Gemelas". Fue así porque según dicen, cuando se instituyó y fundó el Monasterio, Alonso Pérez de Guzmán dejo mandado a su hijo que no se enterrrase ninguno de sus descendientes en aquella Capilla, y que hiciesen nuevos enterramiento, por esto Juan Alonso de Guzmán hizo otra Iglesia para su enterramiento.

El Monasterio de San Isidoro del campo fue fundado el 14 de Febrero de 1301, con 40 monjes cistercienses que permanecieron en él hasta 1431, dejando su fundador Guzmán el Bueno claro algunos aspectos de como los monjes debían de cuidar el patrimonio. Los primeros monjes procedían del Monasterio cisterciense de San Pedro de Gumiel de Izán, Burgos y del de Aranda del Duero, sin olvidarnos que está enterrado en dicho monasterio Guzmán el Bueno.