Dulces del cielo.


Estos son los dulces que me gustan. No esperemos a comprarlos solo por Navidad. Las monjitas son como nosotros, tienen que comer todo el año, no unos días.

Sevilla y su historia.


En Sevilla hay que rendirse a su historia, la que es muy rica y pocos conocen, no a cuatro cerdos políticos o a un grupito de cofrades desterrados hasta de su casa con cámara fotográfica que lo único que buscan es su bienestar.